Cómo aplicar la base y con qué

       Ya hemos comentado que una de las bases que tenemos para realzar nuestra belleza natural es tener una buena base de maquillaje, entonces, ¿Con qué lo aplicamos?

Hoy en día, son muchos los utensilios con los que la podemos aplicar, y cada persona la aplica con la que mejor se defiende. Tenemos que conseguir una base perfecta por lo que deberemos escoger un método con un buen acabado, y si nosotros estamos cómodas a la hora de aplicarlos, mucho mejor.

Aquí os dejo algunos de los más utilizados:
                                                                
ESPONJA DE MAQUILLAJE.

Aquí, tenemos una esponja de maquillaje de látex con forma triangular. Mientras estemos aplicando la base con ella, conseguiremos llegar a todos los 'rincones' del rostro.            
      Podemos echar un poco de maquillaje sobre la parte de arriba de nuestra mano (sin excederse, es mejor quedarse cortas a que nos sobre), impregnamos poco a poco y vamos aplicando dando toques, extendiendo y difumanando a la vez.

BROCHA PARA BASE DE  MAQUILLAJE

Con brochas como esta, podremos aplicar las bases de maquillaje fluídas y conseguiremos un acabado uniforme.

             Con esta brocha conseguiremos no poner exceso de  producto en la cara, y conseguiremos que la aplicación sea exacta. Otro punto imortante acerca de este tipo de brochas, es que también podemos utilizarla para darnos la crema hidratante. En este caso, es aconsejable tener dos, una para la hidratante y otra para la base.
          Y si aplicamos nuestra base con este tipo de brocha, una vez acabemos de aplicarla, podemos 'rematar' y conseguir un acabado perfecto dando pequeños toquecitos sobre el rostro con una esponja de maquillaje.                

BROCHA PARA MAQUILLAJE EN POLVO

Con esta brocha podremos aplicar el maquillaje en polvo (perfecto para fijar la base).

             Pasaremos la brocha por el recipiente del polvo suavemente y a continuación nos la aplicaremos con movimientos largos y muy suaves. Aplicamos y difuminamos a la vez. Conseguiremos un acabado natural. Nos sirve para darnos el polvo compacto y el polvo suelto.

BORLA

        Y aquí tenemos la borla, la idónea para aplicar el polvo suelto.

    
           Al igual que la brocha, impregnaremos con un poco del polvo suelto (sin excederse) y aplicamos dando pequeños toques. Obrendremos un acabado sedoso.